Impact of environmental crime on indigenous women

Published on October 31, 2023

What constitutes an environmental crime has long been subject to debate. However, human-induced environmental degradation and biodiversity loss are both pertinent. Local communities, largely indigenous groups, living around biodiverse areas comprising forests, mountains and marine ecosystems stand to be among the first affected.

The presence of illegal extractive activities, whether mining or logging, attracts men from outside these areas and effectively ‘masculinizes’ these territories. This disrupts regular life and threatens the safety of women, who often have to venture into forests to carry out domestic activities. The impact varies from community to community and is linked to gender roles and patriarchy, and sometimes includes physical violence.

As a part of the Resilience Fund’s broader work on women’s resilience to organized crime, this exploratory policy brief unpacks the ways in which women are struggling, adapting and responding to the impacts of environmental degradation and biodiversity loss caused by the illegal exploitation of forest regions and their surrounds, especially in rural and indigenous habitats. Women living within indigenous communities that have socio-cultural and economic ties to their natural environment are increasingly affected by the growing presence of illegal extractive economies. Forest resources mean different things to men and women, depending on their roles, priorities and interests in meeting household needs and social expectations.

In Indonesia, multinational companies are reportedly flouting laws on land clearing, which contributes to the outbreak of devastating forest fires. © Anton Raharjo/Anadolu Agency via Getty Images

Impact of biodiversity loss and environmental crime on women from rural and indigenous communities presents case studies from four forest ecosystems: the Arajuno forests of the Ecuadorian Amazon, the Sierra Tarahumara forests in Mexico, the Yabassi forests in Cameroon and the rainforests of North Sumatra in Indonesia. The findings show that while local indigenous communities rally to defend their territories against extractive operations and perceived environmental crimes, gender norms and patriarchy limit women’s voices and participation. However, women’s participation in resistance movements has gradually increased, especially against large-scale state concessions, and many have become leading environmental defenders in their communities.

Women’s motivation to voice their perspectives and challenge dominant narratives against indigenous communities through various acts of solidarity is firmly rooted in their desire to protect their livelihoods. Their resilience strategies are similar but context-specific and nuanced across the communities in the four forest ecosystems analyzed in this brief.

This material has been funded by UK Aid from the UK Government; however, the views expressed do not necessarily reflect the UK Government’s official policies.

Impact of biodiversity loss and environmental crime on women from rural and indigenous communities

As a part of the Resilience Fund’s broader work on women’s resilience to organized crime, this exploratory policy brief unpacks the ways in which women are struggling, adapting and responding to the impacts of environmental degradation and biodiversity loss caused by the illegal exploitation of forest regions and their surrounds, especially in rural and indigenous habitats.

Impacto de los delitos contra el medio ambiente en mujeres indígenas


Lo que constituye un delito medioambiental ha sido objeto de debate durante mucho tiempo. Sin embargo, tanto la degradación medioambiental inducida por el hombre como la pérdida de biodiversidad son pertinentes. Las comunidades locales, en su mayoría grupos indígenas, que viven en torno a zonas biodiversas que comprenden bosques, montañas y ecosistemas marinos pueden encontrarse entre las primeras afectadas.

La presencia de actividades de extracción ilegales, ya sean mineras o madereras, atrae a hombres de fuera de estas zonas y «masculiniza» de hecho estos territorios. Esto altera la vida cotidiana y amenaza la seguridad de las mujeres, que a menudo tienen que adentrarse en los bosques para realizar actividades domésticas. El impacto varía de una comunidad a otra y está vinculado a los roles de género y al patriarcado, y a veces incluye violencia física.

Como parte del trabajo más amplio del Fondo Resiliencia sobre la resiliencia de las mujeres ante el crimen organizado, este informe exploratorio sobre políticas desentrañará las formas en que las mujeres luchan, se adaptan y responden a los impactos de la degradación medioambiental y la pérdida de biodiversidad causadas por la explotación ilegal de las regiones forestales y sus alrededores, especialmente en hábitats rurales e indígenas. Las mujeres que viven en comunidades indígenas que tienen vínculos socioculturales y económicos con su entorno natural se ven cada vez más afectadas por la creciente presencia de economías de extracción ilegal. Los recursos forestales significan cosas diferentes para hombres y mujeres, dependiendo de sus papeles, prioridades e intereses a la hora de satisfacer las necesidades del hogar y las expectativas sociales.

En Indonesia, las empresas multinacionales incumplen las leyes sobre desbroce de tierras, lo que contribuye a la aparición de devastadores incendios forestales. © Anton Raharjo/Anadolu Agency a través de Getty Images

Impacto de la pérdida de biodiversidad y de los delitos contra el medio ambiente en las mujeres de comunidades rurales e indígenas presenta estudios de caso de cuatro ecosistemas forestales: los bosques de Arajuno en la Amazonia ecuatoriana, los bosques de la Sierra Tarahumara en México, los bosques de Yabassi en Camerún y las selvas tropicales del norte de Sumatra en Indonesia. Los resultados muestran que, aunque las comunidades indígenas locales se movilizan para defender sus territorios contra las operaciones extractivas y los delitos medioambientales percibidos, las normas de género y el patriarcado limitan la voz y la participación de las mujeres. Sin embargo, la participación de las mujeres en los movimientos de resistencia ha aumentado gradualmente, sobre todo contra las concesiones estatales a gran escala, y muchas se han convertido en las principales defensoras del medio ambiente en sus comunidades.

Su motivación para expresar sus puntos de vista y desafiar las narrativas dominantes contra las comunidades indígenas a través de diversos actos de solidaridad está firmemente arraigada en su deseo de proteger sus modos de vida. Sus estrategias de resiliencia son similares, pero específicas para cada contexto y matizadas en las comunidades de los cuatro ecosistemas forestales analizados en este informe.

Este material ha sido financiado por UK Aid del Gobierno del Reino Unido; sin embargo, las opiniones expresadas no reflejan necesariamente las políticas oficiales del Gobierno del Reino Unido.

Impacto de la pérdida de biodiversidad y de los delitos contra el medio ambiente en las mujeres de comunidades rurales e indígenas

Como parte del trabajo del Fondo Resiliencia sobre la resiliencia de las mujeres ante el crimen organizado, este informe exploratorio desentrañará las formas en que las mujeres luchan, se adaptan y responden a los impactos causadas por la explotación ilegal de las regiones forestales y sus alrededores, especialmente en hábitats rurales e indígenas.

Impact de la criminalité environnementale sur les femmes autochtones


Le débat sur ce qui constitue un crime environnemental est ouvert depuis longtemps. Cependant, la dégradation de l’environnement due à l’activité humaine et la perte de biodiversité sont toutes deux pertinentes. Les communautés locales, essentiellement les groupes autochtones, qui vivent dans les zones de biodiversité composées de forêts, de montagnes et d’écosystèmes marins, seront les premières à être touchées.

La présence d’activités extractives illégales, qu’il s’agisse d’extraction minière ou d’exploitation forestière, attire des hommes extérieurs à ces zones et « masculinise » ces territoires. Cela perturbe la vie ordinaire et menace la sécurité des femmes, qui doivent souvent s’aventurer dans les forêts pour mener à bien leurs activités domestiques. Les conséquences, variables d’une communauté à l’autre, sont liées aux rôles de genre et à la patriarchie et comprennent parfois des violences physiques.

Dans la cadre du travail plus large du Fonds pour la résilience mené sur la résilience des femmes face à la criminalité organisée, cet exposé politique d’exploration décrira comment les femmes luttent, s’adaptent et répondent aux impacts de la dégradation de l’environnement et de la perte de biodiversité causés par l’exploitation illégale des régions forestières et de leur environnement, notamment dans les habitats ruraux et autochtones. Les femmes vivant dans les communautés autochtones ayant des liens socioculturels et économiques à leur environnement naturel sont de plus en plus touchées par la présence croissante d’économies extractives illégales. Les ressources des forêts ont un sens différent pour les hommes et pour les femmes, selon leurs rôles, leurs priorités et leurs intérêts pour répondre aux besoins des foyers et aux attentes sociales.

En Indonésie, des multinationales bafoueraient les lois sur le déboisement, ce qui contribue au déclenchement d’incendies de forêt dévastateurs. © Anton Raharjo/Anadolu Agency via Getty Images

Impact de la perte de biodiversité et de la criminalité environnementale sur les femmes des communautés rurales et autochtones présente des études de cas réalisées dans quatre écosystèmes forestiers : les forêts d’Arajuno en Amazonie équatorienne, les forêts de la Sierra Tarahumara au Mexique, les forêts de Yabassi au Cameroun et les forêts tropicales de Sumatra du Nord en Indonésie. Les conclusions montrent que, si les communautés autochtones locales se rassemblent pour défendre leurs territoires contre les opérations extractives et les crimes environnementaux perçus, les normes de genre et la patriarchie limitent l’expression et la participation des femmes. Toutefois, la participation des femmes aux mouvements de résistance augmente progressivement, en particulier contre les concessions nationales à grande échelle, et beaucoup de femmes sont devenues d’importantes défenseuses de l’environnement dans leurs communautés.

Leur motivation à exprimer leur point de vue et à contester les discours dominants contre les communautés autochtones par le biais de divers actes de solidarité est solidement ancrée dans leur désir de protéger leurs moyens de subsistance. Leurs stratégies de résilience sont semblables, tout en étant spécifiques au contexte. Il existe par ailleurs des nuances entre les communautés des quatre écosystèmes forestiers analysés dans cet exposé.

Ce document a été financé par UK Aid du gouvernement du Royaume-Uni ; cependant, les opinions exprimées ne reflètent pas nécessairement les politiques officielles du gouvernement du Royaume-Uni.

Impact de la perte de biodiversité et de la criminalité environnementale sur les femmes des communautés rurales et autochtones

Dans la cadre du travail du Fonds pour la résilience mené sur la résilience des femmes face à la criminalité organisée, cet exposé politique d’exploration décrira comment les femmes luttent, s’adaptent et répondent aux impacts de la dégradation de l’environnement et de la perte de biodiversité causés par l’exploitation illégale des régions forestières et de leur environnement, notamment dans les habitats ruraux et autochtones.